La antigua Basílica de Guadalupe es uno de los edificios religiosos más importantes de América Latina. Situada junto al Cerro del Tepeyac, el valor histórico del inmueble es apenas comparable con el valor sentimental que le han otorgado generaciones sucesivas de mexicanos y católicos de todo el mundo.
Recién cumplidos trescientos años desde su fundación en 1709, la antigua basílica representa una victoria de la ingeniería mexicana en el afán de preservar el invaluable patrimonio de nuestra. Sin embargo, al encontrarse situada en un paraje de suelos arcillosos ocupado antiguamente por el Lago de Texcoco, la antigua basílica se vio muy pronto amenazada por el riesgo de hundimientos, los famosos asentamientos diferenciales que se deben de controlar a toda costa.
Hacia la década de 1960, el deterioro de la iglesia era tal que los expertos se vieron obligados a tomar una doble decisión: la construcción de una nueva basílica (finalizada en 1976) y el rescate de la antigua. Recordemos que éste fue el lugar donde se pusieron en práctica de manera definitiva los llamados “pilotes de control”, un sistema de nivelación creado por Manuel González Flores, ingeniero mexicano dotado de gran imaginación y talento.
Los pilotes de control, como lo dice su nombre, se encargan de controlar el asentamiento que presentan las estructuras relativo al suelo que embeben sus cimentaciones. Donde un pilote de punta clásico permanece en su lugar aparentando un "levantamiento" sobre el nivel del terreno, los pilotes de control ajustan la estructura a este nivel, asegurando su durabilidad y funcionamiento.
Desde su invención y su primera aplicación, los pilotes de control han sido una solución muy práctica y funcional a problemas de recimentación que, son tan remotos en la Ciudad de México como su historia.
En el siguiente video se pueden apreciar los conceptos básicos de este método, así como la problemática que envuelven y solucionan. Pueden ver las demás partes si les interesa el tema y no sabían de ello.
Como conclusión podemos decir que toda problemática en la Ingeniería Civil tiene solución, e incluso que se pueden generar nuevos métodos que de forma contundente contrarresten el problema. La perspectiva de esta solución fue el no luchar en contra del movimiento del suelo, si no ir a su favor, y de esta manera se puede lograr un procedimiento constructivo eficiente y de gusto para los beneficiados.
Hey muy interesante, no sabia que en la basilica se ocuparon pilotes de control. Pero bueno, como debe de ser: a un gran problema, grandes y creativas soluciones y que mejor que fue un mexicano el que ideó dicha solucion.
ResponderEliminarPues ni mucha victoria de la ingenieria mexicana ya que presento fallas y ascentamientos.
ResponderEliminarLo de los pilotes de control me gusto mucho, ya que no sabia de ellos, investigue un poco mas y pienso que son una herramienta muy util y mas en la ciudad de mexico.